Concepto que abarca aspectos éticos, sociales, culturales y personales. Su raíz etimológica proviene del latín decentia, que implica aquello que “sienta bien” o es “apropiado”, y tradicionalmente ha estado asociado al recato, la compostura y la honestidad en la conducta de las personas. En términos generales, la decencia se refiere a una manera de actuar que respeta la dignidad propia y ajena, ajustándose a las normas sociales y morales vigentes en un determinado contexto. Es un valor que guía el comportamiento digno y honrado, y que se manifiesta tanto en los actos como en las palabras, reflejando integridad y respeto por los demás. En la vida cotidiana, la decencia suele asociarse a la moralidad pública y a las llamadas “buenas costumbres”, especialmente en lo que respecta al pudor, la modestia y la manera de presentarse ante los demás. Así, se considera indecente aquello que transgrede los límites aceptados socialmente, como la vestimenta provocativa o los...