Historia Los francos salios formaban parte de una confederación tribal de origen germánico que surgió en el contexto de la crisis del Imperio Romano en el siglo III. Al igual que otras tribus germánicas, alternaron incursiones sobre las fronteras del Imperio con periodos de colaboración militar (foedus) como pueblos federados de Roma. Hacia finales del siglo III, tras ser derrotados por el emperador Maximiano, los salios fueron asentados en Toxandria (actual región de Bélgica y sur de los Países Bajos) como foederati, bajo la autoridad romana, lo que favoreció su romanización y expansión hacia el oeste.